In Memoriam
La historia de nuestra cooperativa se ha construido y se sigue construyendo por sus asociados.
Aunque la vida es una constante evolución, estamos agradecidos por haber coincidido en este viaje con personas como los doctores Karl Leroy Austin Weeks y José Rodolfo Porcell Pinilla; ambos, asociados fundadores y delegados durante nuestros 53 años de vida cooperativa.
Nuestra institución ha perdido físicamente a dos de sus más grandes militantes, pero sus legados de amistad, compromiso y lealtad, continuarán con nosotros para siempre.
Descansen en Paz.

Dr. Karl Leroy Austin Weeks
El Dr. Karl Leroy Austin Weeks nace el 26 de enero de 1936, siendo el último de ocho hermanos.
Se recibió como médico general en 1965 y como especialista en Ginecología y Obstetricia en 1970, siendo el primer médico panameño en certificarse en endocrinología reproductiva e infertilidad por la Universidad Johns Hopkins (Baltimore, Maryland), ejerciendo en Panamá diversos cargos administrativos en el Hospital Santo Tomás, Hospital Gorgas; como docente en la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá y como académico titular en la Academia Panameña de Medicina y Cirugía.
Su compañera de los últimos años, Consuelo, y sus hijos Marco Antonio, Laura y Karelia, lo recuerdan como un padre amoroso y el abuelo cariñoso y cómplice de Karl, Miles y Grayson.
Fue un respetado asociado, identificado en nuestra membresía con el número 617 desde el 7 de julio de 1976, cumpliendo al momento de su partida, 47 años de vida cooperativa.
Siempre se caracterizó por ser centrado en sus participaciones y por sus constantes e invaluables aportes en nuestras asambleas.

Dr. José Rodolfo Porcell Pinilla
El Dr. José Rodolfo Porcell Pinilla nació el 3 de agosto de 1939.
Se título como Médico Cirujano en la Universidad Autónoma del Estado de México y realizó su residencia en el Complejo Hospitalario de la Caja de Seguro Social, ingresando luego al Instituto de Neurocirugía e Investigaciones Cerebrales de la Universidad de Chile, donde se ganó el seudónimo de “el Milagro Panameño”. De regreso a su país, trabajó en el hospital, la cátedra y la práctica privada, siendo reconocido en Panamá e internacionalmente
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Se afilió a la Cooperativa el 8 de diciembre de 1969 como el asociado No.111 y puso toda su confianza en la gestión, participando activamente durante toda su vida, en las actividades, programas y productos ofertados.
De carácter firme, reservado, ecuánime, certero, fue un caballero de gran corazón con sus padres, hermanos, hijos, nietas, amigos y familiares, quienes lo recordarán siempre como un formidable ser humano.